RESUMEN
La producción de damascos para consumo fresco, es uno de los rubros con menor desarrollo dentro del sector frutícola chileno, cultivándose 2.500 ha desde la IV a la VI región. Se caracteriza porque sólo un 10% de la producción se destina a la exportación como producto fresco principalmente al hemisferio norte, alcanzando volúmenes promedio de 3.000 ton. Entre las variedades plantadas en el país, predominan aquellas de doble propósito (industria y consumo fresco) que presentan una producción muy concentrada a fines de primavera. Estas variedades no tienen una adecuada vida de postcosecha y tienen una pobre calidad organoléptica para los consumidores de los principales mercados de destino. Por otra parte, son tipos de fruta de piel amarilla-anaranjada, siendo las variedades con mejillas rojizas aquellas más demandas internacionalmente. Esta situación determina que los damascos chilenos obtengan precios 50% menores que los de sus competidores directos (Nueva Zelanda). Por otro parte, desde un punto de vista técnico, tanto el manejo de huerto como las técnicas de postcosecha empleadas en esta especie, no han sido innovadas como ha ocurrido en otras especies de carozo. Desde el punto de vista sanitario, la producción chilena de damascos se desarrolla sobre la base de variedades altamente susceptibles al Sharka, enfermedad que podría diezmar la producción local en el mediano plazo.
Si la industria chilena del damasco se organizara e impulsara un sistema que busque innovar aquellos aspectos técnicos y comerciales del producto que limitan su desarrollo, orientando y dirigiendo la investigación hacia el desarrollo de nuevas variedades que satisfagan la exigente demanda internacional, la oferta chilena de damascos liderará el mercado mundial. Considerando esto, el resultado más importante planteado en el proyecto, es la obtención de un sello de calidad que diferenciará al damasco CHILECOT, basándose en la implemetación de manejos agronómicos óptimos para aquellas variedades que siendo actualmente cultivadas en Chile muestran aptitudes agronómicas y comerciales de interés ("Palsteyn" y "Grandir" en principio). En los años sucesivos, el nuevo damasco se sustentará primero en las nuevas variedades recientemente introducidas ("Robada", "Apache", entre otras) y posteriormente, en las variedades desarrolladas en Chile, generadas a partir de las Líneas Genéticas Avanzadas (LGA) obtenidas por el mejoramiento genético local.
Las actividades tendientes a mejorar el manejo de huerto, consideran el establecimiento de Unidades Demostrativo Experimentales (UDE), localizadas en distintas zonas agro-ecológicas. En las UDE se evaluarán nuevas variedades, se realizarán ensayos para disminuir el efecto del añerismo y para determinar índices de madurez. Por otro lado se ejecutarán actividades que buscan mejorar la postcosecha del fruto, para lo cual se considera la evaluación de distintos sistemas (AC, 1-MCP) y la determinación de perfiles descriptivos cuantitativos de calidad, a través de sistemas no destructivos (NIRs y e-nose) que se relacionen con la percepción del consumidor a través de análisis sensorial. Las actividades asociadas al mejoramiento genético, tienen como objetivo la formación de un banco de germoplasma y el desarrollo de LGA, que serán distribuidas al final del proyecto a las empresas asociadas. De este modo, se impulsará un mejoramiento genético participativo, es decir, intervienen no sólo los investigadores sino que también los usuarios de ellas (fruticultores y exportadores). Además, como una forma de mejorar la eficiencia de la selección, se establecerá un campo de estudios genéticos en donde se utilizarán marcadores moleculares para identificar genes asociados a PPV, que luego puedan ser empleados como una útil herramienta para identificar precozmente genotipos resistentes.
Los factores críticos en las actividades de manejo de huerto y postcosecha, dicen relación a la probabilidad de que ellos no logren superar los manejos actualmente utilizados en el país, sin embargo esta probabilidad se ve lejana, debido a la escasa investigación local en el rubro. Desde el punto de vista del mejoramiento genético, el aspecto crítico es que las LGA no superen a las variedades actualmente cultivadas en Chile, instancia poco probable considerando los vínculos que se tienen con avanzados programas de mejoramiento genético en el mundo y el acceso a los mejores genotipos actuales.
La transferencia tecnológica se realizará a través de un seminario internacional, días de campo, charlas divulgativas y la implementación de un sitio web, además se constituirá el comité chileno del damasco, CHILECOT (en vías de protección), que planificará y ejecutará las acciones futuras, que permitirán la consolidación del damasco CHILECOT como un producto líder en los mercados de exportación de fruta fresca.
Se espera que al año 10 desde iniciado el proyecto se alcancen 880 hectáreas de damascos que seguirán el paquete tecnológico propuesto, exportándose un 50% de la producción, la cual corresponderá a fruta diferenciada con el sello de calidad. Esta fruta alcanzará un valor promedio FOB de US$ 2,0/kilo, reduciendo la brecha con el precio del damasco neocelandés, cuya cotización actual es de US$ 3,0 en promedio. Las plantaciones nuevas se iniciarán ya a partir del primer año, al menos con los socios del proyecto y la tasa de plantación se estabilizará en 125 ha/año, considerando una reposición derivada de una vida útil de los huertos de 20 años. En términos de ingreso para el país, se llegará a US$ 17,66 millones de ingreso. CHILECOT se financiará con el aporte de 2% del valor FOB de la fruta que se identifique con el sello de calidad.
El impacto del proyecto será importante en el sector de viveros, productores y exportadores del rubro damasco y por extensión a todo el sector ya que se buscará que ésta sea una experiencia organizativa modelo para otras especies frutales de exportación, única forma de hacer frente a un mercado cada vez más exigente. La Universidad de Chile ratifica con este proyecto su vocación de apoyo a la industria frutícola nacional con iniciativas científico tecnológicas que apuntan a desarrollar genética frutal propia, previendo un acceso a las novedades genéticas cada vez más restrictivo en el mundo. |