Chile ha crecido 10 veces en superficie plantada de arándanos entre 1997 y 2007. La Región del Maule representa 25% de la producción chilena. Los arándanos se consumen por su concentración de antioxidantes, siendo mayores los efectos positivos al consumir fruta fresca. Cerca de 2/3 de la producción mundial de arándanos se comercializa como fruta fresca. EE.UU es el centro de origen y primer productor a nivel mundial de arándanos. Para complementar la demanda norteamericana, Chile exporta en contraestación. El volumen producido por Chile se triplicará en los próximos 3 años. El principal destino de arándanos chilenos es EE.UU. (80%). El mayor consumo en EE.UU., necesario para absorber la mayor oferta chilena, sólo podrá ocurrir si se mejora y uniforma la calidad en destino de los arándanos chilenos.
La creciente oferta requiere aumentar la calidad de la fruta chilena en destino. Hasta el año pasado, la proporción de arándanos exportados en fresco alcanzaba en promedio cerca de 80% del volumen total; pero, por aumento en volumen, esa proporción bajará fuertemente en los próximos años. Para disminuir la caída en proporción de fruta exportable se requiere pasar de la situación actual, con manejos parcializados en cada una de las fases del proceso exportador (precosecha, cosecha y postcosecha), a un enfoque integrador que maximice el rendimiento de fruta exportable, la vida postcosecha y la calidad/condición de fruta en destino. La mayor exigencia de vida postcosecha afecta casi exclusivamente a la fruta chilena, pues la fruta local en EE.UU. se transporta a cortas distancias y requiere breve postcosecha (10-15 días). Sin embargo, la fruta chilena, que se exporta crecientemente por barco (59% en 2002-03 vs. 95% en 2008-09), necesita 45-60 días para llegar al consumidor. El mayor tiempo en postcosecha de la fruta chilena baja su calidad y aumenta su variabilidad.
Este proyecto a 3 años, presentado por la Universidad de Talca, busca establecer la importancia relativa de diversos factores en cada fase del proceso exportador (precosecha, cosecha y postcosecha) de arándanos en fresco a EE.UU. Aquellos con mayor peso específico se integrarán en un modelo que conduzca hacia el establecimiento de paquetes tecnológicos efectivos e innovadores, que aumenten la calidad en destino y reduzcan la variabilidad dentro y entre partidas de fruta. El proyecto contempla evaluar la satisfacción de los consumidores midiendo calidad sensorial y nutracéutica en destino (EE.UU.). El modelo iniciado en la Región del Maule podrá ser ampliado a otras zonas productoras de arándanos en el país. Con ello se tendrá un impacto global sobre la industria. Los factores críticos de éxito serán los que satisfagan a los tres componentes de la cadena productora de arándanos: productores (cantidad de fruta exportable), exportadores (vida postcosecha de la fruta) y consumidores (calidad organoléptica y nutracéutica). Para su realización tiene como contraparte a una empresa de agroquímicos (ANASAC) y a dos exportadores/productores (Valle-Maule y Sun Belle), que han puesto a disposición del proyecto, huertos que que reflejan la variabilidad genética y ambiental real de la producción de arándanos en el Maule. Además cuenta con el patrocinio de la Mesa Berries de la R. del Maule, y el Comité de Arándanos de Fedefruta. Adicionalmente considera la activa participación de investigadores de Michigan State University, con los que existe una productiva interacción previa en estos temas.
El enfoque actual de considerar la postcosecha como un proceso aislado había sido exitoso hasta ahora, pues la oferta de fruta y las exigencias eran menores, pero no lo será en los años venideros (se triplicará oferta en próximos 3 años). Al haber sobreoferta, las restricciones serán mayores con lo cual se espera que el % de fruta exportable alcance un 60%. Para afrontar las mayores exigencias en calidad ante la saturación de los mercados, el proyecto propone un nuevo paradigma con una estrategia integradora que implica el desarrollo de paquetes tecnológicos. Con la plena implementación de dichos paquetes, se espera que el porcentaje de fruta exportable sólo se reduzca a 70%.
Para que estos desarrollos tengan real impacto, se requiere que los usuarios incorporen el nuevo paradigma integrador en la exportación de arándanos frescos. Esto se logrará mediante actividades de transferencia (cursos, seminarios, días de campo); servicios (asesoría e implementación de paquetes tecnológicos, evaluación de sitios de impacto en líneas de embalaje y medición de antioxidantes en fruta a ser exportada); así como entrenamiento de la visión integradora a cuerpos técnicos (cursos de capacitación, memorias de Ing. Agrónomo y tesis de Magíster). Todo ello apuntará a lograr el objetivo central de maximizar el rendimiento, calidad y vida de postcosecha de arándanos frescos, producidos por la Región del Maule. |