Con el proceso de reforma de salud llevada a cabo en nuestro país, la gestión de las instituciones asistenciales deben mejorar su eficiencia, efectividad, calidad y seguridad en los servicios brindados a la comunidad. En este contexto, las estructuras y procesos que dicen relación con los cuidados de enfermería han sido ampliamente documentados por su impacto favorable en los resultados globales tanto financieros, clínicos, de seguridad y de satisfacción de pacientes de las instituciones hospitalarias. Entre las variables estudiadas más relevantes se destacan: el nivel de instrucción y entrenamiento de las enfermeras, el nivel de experiencia laboral, la dotación o asignación de personal de enfermería (entendida como el número de personal de enfermería dedicada a los cuidados), la proporción de enfermeras universitarias o registradas del total de la dotación de personal de enfermería, y el "adecuado" soporte clínico y ambiental para la gestión de cuidados de enfermería. Respecto a la variable de asignación de personal de enfermería, esta representa para las instituciones de salud en la actualidad más del 60% del total de personal hospitalario y entre el 40% a 70% del total de las remuneraciones. Determinar la asignación de personal de enfermería requiere identificar las cargas de trabajo de enfermería en función del perfil de pacientes según cuidados de enfermería y complejidad de tratamiento médico. Tanto a nivel nacional como internacional, existen variados estudios que han analizado las cargas de trabajo de enfermería. El problema radica en que los diferentes métodos que existen apuntan a clasificar al paciente por complejidad de tratamiento médico o basándose en diagnósticos médicos o se han centrado en unidades de cuidados intensivos, sin considerar en forma global los cuidados de enfermería que demanda el paciente. Por otra parte, los esfuerzos que han intentado medir cargas de trabajo de enfermería con perfiles de pacientes según cuidados de enfermería tanto en el ámbito internacional y nacional han sido esfuerzos locales utilizados sólo en algunos hospitales. El objetivo principal del proyecto es diseñar un modelo de asignación de personal de enfermería que integre los cuidados de enfermería y la complejidad de tratamiento médico, asumiendo como hipótesis principal que esta integración o relación permitirá agregar valor a los métodos actuales de asignación de personal por su mayor amplitud, comparación y estandarización de información. El Modelo de Asignación de Personal de Enfermería (MAPE) se basará en el método de categorización de pacientes por dependencia y riesgo desarrollado por el Servicio de Enfermería del Hospital Clínico de la Universidad Católica de Chile en 1995 y replicado desde entonces en numerosos hospitales públicos y privados del país, y en la complejidad de tratamiento médico, basada en el uso del sistema de clasificación de egresos hospitalarios utilizando los grupos relacionados con el diagnóstico (GRD's). |