La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es la enfermedad respiratoria crónica mas común, su causa principal es el tabaquismo y se caracteriza por una progresiva limitación del flujo aéreo que no es completamente reversible que se demuestra en la espirometría. Representa un grave problema de salud pública mundial, afectando aproximadamente al 10 por ciento de la población adulta de 40 años y más de edad. Ocupa actualmente el cuarto lugar entre las principales causas de muerte en el mundo, proyectándose que para el año 2020 ascenderá al tercer lugar y además ocupará el quinto lugar entre las principales causas de discapacidad.Actualmente se la considera como una enfermedad sistémica, con manifestaciones clínicas que se deben tanto a su compromiso pulmonar como extrapulmonar, destacando la afección de los músculos periféricos, especialmente los músculos de las extremidades inferiores que son los relacionados con la deambulación, lo que explica porqué muchas veces los pacientes presenten como síntoma limitante del ejercicio la sensación de cansancio o fatiga de las extremidades inferiores antes que la disnea. Tanto la disnea de esfuerzo como el compromiso muscular periférico llevan a una progresiva intolerancia al ejercicio y reducción del nivel de actividad física de los pacientes, causando descondicionamiento y agravando aun mas la intolerancia al ejercicio, lo que produce un círculo vicioso. La suspensión del tabaquismo es la única medida eficaz en reducir el deterioro progresivo de la función pulmonar y la mortalidad de la EPOC. Pero lo que mas aqueja a los pacientes que sufren EPOC son los síntomas como la disnea y el cansancio de las extremidades inferiores y la disminución de la capacidad funcional que les impide realizar sus actividades de la vida diaria con normalidad con el consecuente deterioro de su calidad de vida. El tratamiento broncodilatador inhalatorio consituye la base del tratamiento sintomático, demostrando que disminuye la disnea en ejercicio y reposo, la frecuencia de las exacerbaciones agudas y produce mejoría de la calidad de vida de los pacientes pero no es suficiente para controlar la sintomatología en la gran mayoría de los pacientes. La rehabilitación pulmonar (RP) es un programa multidisciplinario cuyo componente principal es el entrenamiento físico, además de educación, apoyo piscosocial, intervención conductual y apoyo nutricional. La guía MINSAL para el manejo ambulatorio de la EPOC la recomienda en todo paciente que persista sintomático y con limitación de las actividades de la vida diaria a pesar de recibir tratamiento adecuado, ha demostrado que disminuye la disnea, produce mejoría de la capacidad funcional y de la calidad de vida, aunque no ha logrado demostrar un efecto significativo sobre la mortalidad. En nuestro país existen muy pocos centros de salud que cuenten con un programa de RP, tanto en la salud pública como en la salud privada y el costo aproximado estimado en Estados Unidos de un programa de RP de 8 semanas de duración es de 2.200 dólares por paciente, además en Chile muchos pacientes con EPOC viven alejados de los centros de salud, resultándoles difícil asistir a un programa de RP con la adecuada regularidad. Tampoco está claro si el efecto de la RP sobre la capacidad de ejercicio produce un incremento significativo de la actividad física diaria. Los pacientes con EPOC presentan una reducción significativa de su actividad física acentuándose con el avance de la enfermedad y esto se asocia a peor pronóstico en términos de función pulmonar y mortalidad.Incentivar a los pacientes a que incrementen su nivel de actividad física forma parte de los contenidos de la educación para los pacientes con EPOC, sin embargo la educación por si sola no ha demostrado ser efectiva para lograrlo. Los dispositivos portátiles que permiten cuantificar los pasos que se caminan, llamadores contadores de pasos, han sido validados como fuente de información confiable del grado de activididad física. Hay evidencia de que los contadores de pasos son útiles para incentivar la actividad física en diferentes poblaciones (principalmente en adultos mayores, obesos, sedentarios) presentando beneficios clínicos. Dado que el tratamiento farmacológico no es suficiente para controlar la sintomatología de los pacientes y el acceso de los pacientes a programas de RP en nuestro país es muy bajo, el estudio propuesto tiene como objetivo determinar si el incentivo de la actividad física mediante el uso de los contadores de pasos ejerce un efecto significativo sobre la capacidad de ejercicio en los pacientes con EPOC. Para cumpir con este objetivo se ha propuesto llevar a cabo un ensayo clínico randomizado de tipo ambulatorio en el que en el grupo control recibirá el tratamiento según las Guías MINSAL, siendo la única diferencia en el grupo experimental el incentivo de la actividad física mediante el uso de los contadores de pasos de acuerdo a un protocolo preestablecido. La duración de la intervención del estudio propuesto es de 12 semanas en base a la literatura publicada. Se ha elegido la prueba de caminata de 6 minutos como forma de medición de la capacidad funcional en la EPOC y como la variable resultado principal, dado que se encuentra adecuamente estandarizada y validada y se asemeja mas a las actividades de la vida diaria, además existe consenso en la literatura internacional acerca del cambio mínimo clinicamente importante de la distancia recorrida en la prueba de caminata de 6 minutos para establecer si una intervención produce cambios clínicos que puedan ser considerados como beneficiosos para el paciente. Nos parece muy relevante para la salud pública a nivel nacional e incluso en el extranjero determinar si se pueden utilizar los contadores de pasos como un incentivo que ayude en el manejo de los pacientes con EPOC, teniendo en consideración su fácil implementación y relativo bajo costo, si resultaran ser efectivos, la indicación de su uso podría incluirse como parte del tratamiento no farmacológico en las guías MINSAL para manejo ambulatorio de la EPOC. Si los resultados del estudio demuestran que los contadores de pasos no presentan beneficios clínicos también se obtendría una información muy relevante, dado que las intervenciones terapéuticas, por muy económicas y atractivas que parezcan, deben implementarse sólo cuando hay evidencia de su beneficio clínico. |