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• La investigadora, Premio Nacional de Ciencias Naturales 2014, analiza la importancia de acortar la brecha entre mujeres y hombres en su área, y celebra la realización del próximo Gender Summit en Chile.

La vida de Ligia Gargallo siempre ha estado ligada a la ciencia. Su trayectoria comenzó en la Universidad de Concepción, en la carrera de Química y Farmacia, primer paso que la llevó a trabajar a la Universidad de Paris, en el Laboratorio de Química Física Pierre et Madame Curie.

Posteriormente, hizo un doctorado en Ciencias Químicas en la Université de Liège en Bélgica. A su regreso se integró a la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde fue pionera en la investigación en macromoléculas.

Su trabajo ha sido objeto de múltiples reconocimientos, que le han hecho destacar en áreas que, por lo general, son dominadas por hombres. En 2007 recibió el Premio L’Oréal-UNESCO a Mujeres en Ciencia, como representante de América Latina y el Caribe, y en 2014 fue galardonada con el Premio Nacional de Ciencias Naturales.

La doctora Gargallo sabe lo difícil que es destacar en el ambiente científico y, por eso mismo, afirma que es necesario trabajar por disminuir las brechas existentes. “Estamos en una sociedad que está en evolución pero aún con una significativa inequidad de género. Esperamos que se reconozcan y aprovechen las cualidades y la inteligencia de las mujeres. Eso es esencial en todos los ámbitos, y especialmente en ciencia, tecnología e innovación”, afirma.

Para la académica, la discriminación que sufre la mujer es preocupante, porque con los años se ha naturalizado. “Somos una sociedad muy machista, donde la mujer experimenta problemas porque desde tiempos antiguos a los distintos géneros se les han otorgado roles, y los enfrentamos como madres, proveedoras del hogar o cuidadoras. La sociedad en su conjunto considera que esas diferencias son justas y naturales, por lo tanto, ni siquiera se han cuestionado. Ése es un problema serio, que de alguna manera debemos enfrentar”, explica.

Gargallo va más allá y opina que los estereotipos hacen que muchas mujeres vivan la desigualdad de género de forma natural, aceptándola y renunciando a sus intereses. “Esto trae como consecuencia la autoexclusión de la mujer, producto de la imagen que la sociedad y los individuos tienen de ella, que retroalimenta la visión que las mujeres tenemos de nosotras mismas”, asevera.

“Sin tomarme como referente, quisiera dar un testimonio de lo que significa realizarse como mujer, madre y científica. Esos roles se pueden cumplir, y creo que todas las mujeres lo podemos hacer. No es fácil, pero creo que se puede y debemos de alguna forma estimular y dar a conocer lo maravilloso y apasionante que es abrazar una profesión como ésta”, afirma.

Gargallo comenta que la diversidad entrega un gran aporte a estas áreas: “Es un hecho que la ciencia es la piedra angular del desarrollo. Pero para que impulsemos la CTI en nuestro país, debemos reconocer y aprovechar la inteligencia y las cualidades de cada género”.

Finalmente, para Ligia Gargallo, el Gender Summit 12 organizado por CONICYT en Chile, permitirá abrir un espacio de diálogo en esta área. “Me parece muy interesante que nuestro país lidere esta cumbre y las científicas nos sentimos muy halagadas de tener este evento. Debemos aprovecharlo al máximo, porque eso significa que la equidad de género va a contribuir a la ciencia, la tecnología y a la innovación de este país”, finaliza.